Aquí teníamos una habitación super grande y cómoda con aire acondicionado, ¡perfecta para descansar! El personal fue amable y atento 😊.

Personal majísimo, ¡estuve muy bien!

Ubicación: el hotel estaba cerca del valle.

las habitaciones con aire acondicionado. tiene un horno de microondas, una placa y una lavadora. ubicación cerca de las montañas, del río y también de una zona agradable. fuimos a ver el mosque, situado a un agradable paseo del lugar.

No había nada que no me gustara.

Este lugar tiene un ambiente tranquilo, una ubicación excelente y el personal es muy amable, las habitaciones están impecables y hay una gran variedad de comida deliciosa.

El personal era muy amable y el director del hotel me encantó; las habitaciones eran amplias y tenían aire acondicionado.

Nos dieron una agradable cena a pesar de no tenerla reservada, incluso con la lluvia torrencial que caía. El personal, especialmente el hombre que gestiona el lugar, fue muy atento. La cena fue excepcional, el tajín de pollo fue el mejor que comimos durante todo el viaje. Aunque el lugar está apartado, nos proporcionó mucha tranquilidad. El dueño del alojamiento y su familia fueron muy amables, siempre preocupándose por nuestra comodidad. Además, el desayuno y la cena eran deliciosos y asequibles. Incluso pudimos cancelar una noche sin problemas. Mohamed, el dueño, es una persona encantadora y muy involucrada en la comunidad. Durante el Ramadán, disfrutamos de una cena con toda su familia, nos sentimos como parte de ellos. Sin duda, es un gran lugar para visitar la zona y relajarse.

Nada, ninguna queja.

Las habitaciones son cómodas y enormes, con vistas asombrosas, minibar, chimenea, llave electrónica y cocina completa.

Me encantó la decoración de este hotel, especialmente en las áreas comunes. Los muebles eran elegantes y con un toque tradicional marroquí, lo cual le daba un ambiente acogedor y auténtico. Además, la accesibilidad para las personas mayores era excelente. Había rampas y pasillos amplios que facilitaban el desplazamiento en silla de ruedas o con andador.

Me gustaría que el hotel tuviera más actividades para personas mayores. Sería maravilloso si ofrecieran clases de yoga o de tai chi en la terraza, por ejemplo.

El dueño y su familia fueron amables y se preocuparon por nuestra comodidad. El personal era atento y el tajín de pollo en la cena fue excepcional. Mohamed, el dueño, era una persona encantadora y nos hizo sentir como miembros de su familia. El entorno era precioso y tranquilo. La habitación, aunque básica, era amplia y limpia. La piscina era genial para relajarse al final del día. No tuvimos problemas con el ventilador en lugar del aire acondicionado.

Estuve muy bien, no tuve ningún inconveniente.

La vista desde el balcón de mi habitación era simplemente impresionante. ¡Sentí como si estuviera en la cima del mundo, con vistas a las majestuosas Montañas del Atlas! Además, el personal en la recepción fue muy amable y servicial, hablando varios idiomas. Un verdadero lujo para cualquier viajero.

Piscina verde.

Me encantó la decoración del hotel Salwa en Ait Benhaddou. Los colores cálidos y los detalles tradicionales crean un ambiente acogedor y encantador. Además, las áreas comunes estaban muy bien cuidadas y limpias, lo cual es importante para las personas mayores como yo. me gustó que el hotel fuera accesible para personas mayores, ya que había rampas y pasillos anchos que facilitaban el movimiento sin dificultad.

Me hubiera gustado que el hotel Salwa en Ait Benhaddou contara con un servicio de traslado o asistencia adicional para las personas mayores. A pesar de que los niños que trabajaban allí eran muy atentos, hubiera sido de gran ayuda contar con un personal capacitado para brindar apoyo y facilitar las actividades diarias de los huéspedes mayores.

Limpieza genial, lugar humilde y familiar, cómodo y tranquilo en las montañas. Mohamed es encantador y nos hizo sentir parte de su familia durante el Ramadan. La cena de tajín de pollo fue excepcional. Excelente relación calidad-precio.

Insisto, este lugar es super recomendado.

La habitación fue amplia, básica y limpia. La piscina fue un puntazo para relajarse al final del día. El personal fue agradable y nos dieron de cenar cuando llegamos sin tener reserva.

Nada, todo fue genial.

Nos encantó el entorno precioso del hotel y su ambiente familiar. La habitación era amplia y básica, pero estaba limpia y cómoda. Aunque la piscina era un puntazo para relajarse al final del día. Además, el personal del hotel era muy amable y nos ofrecieron una deliciosa cena de bienvenida sin tenerla reservada.

No encontramos ninguna desventaja en nuestra estancia.

Mi pareja y yo nos hospedamos en el encantador Salwa durante nuestro viaje a Ait Benhaddou. Nuestra estancia fue de tres noches y nos recibieron con una hospitalidad excepcional. Mohamed, el dueño, nos hizo sentir como parte de su familia, invitándonos a compartir la cena durante el mes de Ramadán. El entorno del hotel es precioso y pudimos relajarnos en la piscina al final del día. Aunque nuestra habitación no tenía aire acondicionado como indicaba la reserva, el ventilador fue suficiente ya que no hizo mucho calor. En general, una gran opción para visitar la zona y disfrutar de una experiencia auténtica.

Recomendaría a todos este lugar.